Asturias en Europa (C.P. Liceo Mierense)

Los alumnos y alumnas de Educación Primaria del C.P. Liceo Mierense queremos compartir con otros compañeros de Europa nuestras costumbres, juegos, fiestas, leyendas, mitos...

miércoles, noviembre 29, 2006

LA SIRENA O LA SERENA

Según cuentan las leyendas, la sirena era una moza muy hermosa, con un apetito desordenado, que comía continuamente pescados y mariscos. Una mañana su madre, harta de compalcerla hasta entonces de dijo:-
¡ Quiera Dios que te conviertas en pez!
Esa misma tarde, cuando la joven se bañaba en el mar, sintió como sus piernas se iban cubriendo de escamas y se convertían en una poderosa aleta.

No tardó en consolarse, sintiéndose libre, sin otra preocupación que nadar y bucear. Entonces, llena de alegría, empezó a cantar.

Y es por sus canciones, su belleza y alegría que los marinos la quieren, pues su intención no es desviarles de su rumbo sino alegrarles la ruta.

Las criaturas más semejantes en la mitología clásica son las nereidas, ninfas de los mares, hijas de Nereo y Doris.Su función era velar por los navegantes en sus travesías. Así hicieron con Jasón y los Argonautas, en su periplo en pos del vellocino de oro.

martes, noviembre 21, 2006

LAS BRUXAS O LES BRUXES


La figura de la bruxa, también conocida como Guaxa o Curuxa, la encontramos en cantares, cuentos y leyendas populares de Asturias y también se nos describe a la bruxa en documentos de procesos judiciales contra ellas llevados a cabo por la inquisición en el siglo XVII (en Asturias son muy escasos y poco importantes los juicios contra brujas, al contrario que en otras zonas como la vasco- navarra, destacando el proceso de Zugarramurdi). La imagen de la bruxa que se nos da en los cuentos y que a menudo es muy despectiva: mujer concubina del diablo, hacedora de locales males, perteneciente a una secta demonio- idolátrica. Se nos cuenta que cada bruxa tenía su rango y que se reunían en aquelarres (en euskera prado del macho cabrío), fiestas en las que celebraban ceremonias sacrílegas presididas por la figura del macho cabrío y en las que bailaban, se embriagaban y copulaban hasta el amanecer. También existía el mito de que la bruxas podían adoptar forma de animal salvaje e incluso estaban acompañadas de lobos que obedecían todas sus ordenes, como en el caso de María García la lobera, bruxa oriunda de tierras llaniscas de la que se decía estar siempre acompañada por 7 temibles lobos siendo estos sus siervos. María García la lobera fue ajusticiada en el siglo XVII por la inquisición. Sin embargo la realidad debía ser muy diferente. La bruxa debía ser un mujer con una vida solitaria, viviendo apartada del resto de la aldea, recogiendo plantas, pequeños animales... En el siglo XVII el médico era sustituido en las zonas rurales por santones y bruxas. En aquella época la medicina era mas temida que la propia enfermedad y las bruxas poseían conocimientos y experiencias heredados y acumulados desde hacía siglos. Se encargaban sobre todo de las enfermedades propias de las mujeres, de conjuras contra males de ojo y otras para amores imposibles. Mezclaban magia con medicina, sirviéndose de todo tipo de minerales, animales y sobre todo plantas, conociendo las propiedades venenosas o salutíferas de éstas. Utilizaban Cigüería contra ulceras externas, el Belenio como sedante y que junto a la belladona y la piel de la amanita muscaria servían para huir de la realidad. También la Digitalina, buena para corazones cansados o mortalmente mala si se administra en exceso. También usaban con muchísima frecuencia la Ruda, planta con la que se evitaron muchisimos embarazos no deseados

viernes, noviembre 17, 2006

20 Aniversario adhesión de España y Portugal a la Unión Europea
















Con los mejores deseos de los alumnos y alumnas de 5º B del C.P. Liceo Mierense en el 20º Aniversario de la adhesión de España y Portugal a las Comunidades Europeas

martes, noviembre 14, 2006

EL SUMICIU O SUMICIO

El Sumicio es muy similar en todo al Trasgu/Trasno, pero con una clara diferencia, que es la de ser invisible físicamente, a la par que hace desaparecer las cosas y puede ser dañino para las personas; este carácter dual, que encarna la eterna lucha entre el bien y el mal, es consustancial al mito y lo podremos constatar en todos los estudiados. Decíamos que el Sumicio acostumbra a hacer que las cosas desaparezcan de manera especial aquellas que, en un determinado momento, resultan imprescindibles. Así, cuando se precisaban unas tijeras o un cuchillo en la casa y no aparecían, la malhumorada ama murmuraba:
"Paez que lo llevóu el Sumiciu". Así lo hemos oído multitud de veces en nuestra propia casa y así lo atestiguan algunas curiosas historias, como aquella en que la devota señora que entra en la iglesia y va a rezar el Rosario y no encuentra el suyo, estando segura de haberlo traído con ella, por lo que exclama: "En mi vida nunca oín qu'en la iglesia entrase´l Trasno; pos si él nun entra eiquí, quen me garróu el rosario". Pero el Sumicio no se conforma con hacer desaparecer las cosas, que no pasaría de ser el lado más o menos desenfadado de su actuación, sino que tiene poder suficiente para hacer daño, "sumiendo" a las personas, casi siempre niños ("sumir" es sinónimo de desaparecer, pero en sentido de progresión, no con carácter instantáneo). De ahí procede el conocido dicho popular, muy repetido aún entre nuestras gentes: "Mal sumicio te suma" (o esta otra variante: "Mal sumicio te lleve"). Por tanto, está provisto de unos efectos dañinos y letales, como si de un poderoso virus se tratase, lo que le asemeja a otro mito poco conocido, el de los "Malinos", sobre el que Alberto Álvarez Peña ha hecho decisivos estudios.Aunque el Sumicio es más perverso que el Trasno y resulta muy difícil deshacerse de él, siempre hay una posibilidad y en este caso, se trata de la oración de San Antonio, la cual, si va acompañada de una dádiva, da un resultado sorprendente, ya que se halla pronto lo perdido, que se atribuye por las gentes no a un mero mecanismo de estimulación mental, sino a la acción benéfica del milagrero santo, que bloquea los perversos poderes del Sumicio. Bien sabido que al rezar la oración no se puede cometer ningún error, pues entonces el objeto deseado nunca más aparecerá. En Somiedo y otros lugares, aparece en acción la "riestra" de ajos, ya que, en el trasfondo de nuestros mitos siempre se encuentran las ánimas, las brujas y... los diablos.

EL SUMICIU
Figura: Indeterminada. Nun hai dala indicación d'ella.

Acciones: Fai esapaecer d'esmenu y incamentatiblemente les coses y les persones, xeneralmente aquelles.

Apaiciones: El Sumiciu nun se ve.

Relaciones colos humanos: Nun se manifiesta más qu'al través de la esapaición de les coses. Cuandu los obxetos esapaecen indesplicablemente del sitiu onde taben, o onde debíen tar, ta manifestándose la so presencia.

viernes, noviembre 10, 2006

LAS LAVANDERAS

Un mito de gran antigüedad y, como todos los estudiados, de procedencia indoeuropea, ya que leyendas similares afloran a las nuestras son guardadas celosamente en el acervo popular en tierras vascas y catalanas, pero también bretonas o germánicas.
Las Lavanderas se nos presentan como ancianas de rostro arrugado, con cara de "mal carís" y desgreñada cabellera blanca, que emiten altas y desagradables voces allá en las orillas de los ríos, donde lavan perennemente su raída ropa, golpeándola con palas, que, una vez concluido el trabajo o cuando oyen ruidos sospechosos, les sirven para surcar el río rumbo a sus cuevas a velocidad vertiginosa, donde se esconden hasta que el silencio vuelve a reinar en el valle; o bien, si el peligro es cierto o son descubiertas cuando lavan, allí es donde mascullan su cruel venganza.

Les Llavanderes son muyeres vieyes y arrugaes que llaven ropa nos ríos pela nueche, nun-yos gusta que les miren, polo tanto si alguien les ve puen afuéguenlos nel ríu, dalgunes tienen una parte positiva al echar un gabitu apagando fueos nes biesques desviando el cursu del ríu

En cambio, conviene precisar que este carácter maligno, que en este mito resulta predominante, no es exclusivo, ya que en ciertas ocasiones, las lavanderas actúan bondadosamente. Así, suelen ayudar a los niños o a los viejos cuando están en peligro por haberse perdido en el bosque; por haber peligro de tormenta, etc.

jueves, noviembre 09, 2006

L' HOME LLOBU

'Un hombre puede convertirse en lobo si pesa sobre él alguna maldición; su aspecto es mitad animal, mitad hombre, y hasta puede caminar a cuatro patas; se dice que será home-llobu el séptimo hijo varón seguido de una familia, o los hijos de un clérigo, los hijos ilegítimos; se pueden transformar también a causa de una maldición paterna, o por la brujería de alguna muyer; se dice que pueden llegar a devorar a los hombres'.
El proceso de conversión del ser humano en un lobo o “licantropía” es un fenómeno conocido desde la más remota antigüedad; así, suele recurrirse para explicar el origen del mito a rituales célticos en honor de una divinidad, Lug, personificada en el lobo, y en ciertos ceremoniales propios de las Lupercales romanas, coincidentes con el ocaso invernal; el mismo trasunto se ve en la mitología griega, con el rey Lycaón de Arcadia convertido en lobo por decisión de los dioses. El fenómeno se extiende por toda el área indoeuropea: los "gerulf" galos; "wer-wolf" ingleses; "loup-garou" franceses, etc, según el testimonio que R. Baragaño recoge de M. Menéndez y Pelayo.

Tanto en el territorio vecino de Galicia (el "lobis-home") como en el occidente de Asturias, se cree que el origen de la conversión de los humanos en lobos se debe a una maldición, pues en un matrimonio donde todos los hijos son del mismo sexo, al llegar al séptimo o noveno, éste nace con este estigma, a no ser que le apadrine el hermano o hermana mayor, según sean varones o hembras; Álvarez Peña añade aún que los hijos ilegítimos, máxime si eran de un cura, podían estar expuestos a la transformación, por lo que se les orinaba sangre por encima. La maldición tiene caducidad, ya que a los siete años se rompe el maleficio, pues de no ser así el alma se vería condenada eternamente.La transformación física ocurre generalmente de noche, en días señalados (miércoles, viernes), que otros autores discuten; el rito mágico de conversión y, en su caso, de desencantamiento, coincide: el sujeto se revuelve en el polvo, como si de alguna manera quisiera empaparse de los poderes telúricos de la madre-tierra, a la que se los devuelve en su integridad cuando ha pasado el tiempo prefijado de siete años.

Mientras algunos autores consideran que los hombres-lobo siguen conviviendo con los demás, ya que recuperan su forma humana tras las crisis pasajeras, otros mantienen que los "lloberos" viven con las manadas, convirtiéndose en sus líderes, ya que pueden utilizar simultáneamente el instinto animal y la inteligencia humana. Así, el "lobishome" gallego, que se extiende por el occidente asturiano, es, según descripción de A. Peña, mitad humano y mitad cánido, sus brazos y piernas son muy largos, tiene unas enormes garras y puede ser bípedo u cuadrúpedo, según las circunstancias, con ojos rojos y sesgados que se tornan verdosos con la luz de la luna; su ataque a los humanos es despiadado y bestial, siendo creencia extendida que su herida se infecta y no cura. Ramón Sordo recoge la leyenda de los lloberos e Burbudún (Llanes), que eran los líderes de la manada, pues se habían criado entre ellos, y A. Peña la de los "llobos meigos" de Mieldes, etc. (Cangas del Narcea), que sólo se volvían lobos por las noches.

Una de las más curiosas noticias sobre este fenómeno nos la proporciona el mismo autor en Tormaleo (Ibias), aunque la leyenda, que ya antes había recogido Aurelio de Llano, está extendida por toda Asturias, como hemos podido constatar en concejos de Navia, Castropol, etc. Es la del "llobo la calza", que las madres aún cuentan a sus hijos pequeños: un rapacín gustaba mucho de comer carne; un día, su padre le maldijo con estas palabras: "Lástima te fagas llobo, pá que te fartes de carne". Y así ocurrió, pero la transformación fue tan inesperada, que al lobo no le dio tiempo a quitarse una de las calzas, de ahí su nombre; a los siete años, tras el habitual revolcón en el polvo, el joven recuperó su presencia normal. Otra noticia que el citado autor recogió en Belmonte, nos cuenta que un joven se convirtió en "lobo cerval o cervante" por maldición de su padre; perseguido en una montería, cayó en un pozo y se desencantó.¿Hay algún conxuro para acortar la duración de la maldición? Ya hemos visto que sí en la leyenda anterior.
Los procedimientos, según vemos en la tradición gallega, son muy variados: quemarle la piel en el mismo momento de la transformación, o herirlo con bala de plata bendecida; o hacerlo sangrar con una rama de acebo bendita en Ramos; si el caso es de suma gravedad, no había más remedio que matarle y después quemarle. Hay hombres-lobo, como hemos visto, pero también mujeres-lobo, las "lloberas", como la famosa "llobera" de Posada de Llanes. Esta joven, llamada Ana María García, había sido maldecida por su padre y se marchó por las majadas con los pastores. Catalina González, famosa bruxa de Bricia (Llanes) la transformó en llobera, en el momento de morir, según ella misma refirió ante el tribunal inquisitorial en 1648.

EL BUSGOSU O BULLIGOSO

Como los ríos y las fuentes, poseen su mito los bosques, mito varonil, mitad hombre, mitad bestia salvaje como las agrestes espesuras en las que habita. Tiene la figura del Fauno del paganismo, con espesa cabellera, cuernos retorcidos, rostro, brazos y torso humanos y patas de cabra. En algunas regiones de nuestra provincia le acusan de perseguir a las mujeres y llevarlas a su cabaña, como el Sátiro de la mitología griega.
Es el protector de los bosques y de los seres que en ellos habitan ; tiene mala voluntad a los cazadores y procura espantarlos o extraviarlos, pero no los ataca, sin duda porque reconoce su superioridad.
Si se le encuentra es inútil perseguirle, porque no se le alcanzará jamás, y si se le irrita, puede hacerles caer en una cortadura o estrellar a sus perseguidores en el fondo de un barranco.
Es también un mito indoeuropeo, aunque entendemos que puede tener antecedentes prehistóricos, ya que la presencia de personajes de apariencia humana, aunque cubiertos con un posible disfraz ritual zoomorfo es bastante habitual en el arte cavernario, como por poner un ejemplo, el famoso chamán de Trois Fréres. En la misma línea, los modernos estudios han establecido evidentes paralelismos entre nuestro personaje y algunas divinidades antiguas, como, en este caso, con el dios céltico Cernunnos -por cierto, conocido desde antiguo en nuestra región, donde han quedado vestigios toponímicos indudables-, tal como se le representa en el célebre caldero ritual de Gundestrup (Dinamarca, s. I a. C.), con apariencia mitad humana, mitad caprina. Quizá sea factible pensar que sobre un sustrato primitivo, en forma de deidad indígena relacionada con ciertas creencias espirituales o anímicas relacionadas con el poder regenerador de los bosques, se halla impuesto, en plena romanización, una deidad importada, quizá el propio dios romano Silvanus.
Este mito, extendido por todo el viejo solar europeo, recuerda en gran medida a personajes mitológicos muy conocidos, como el "basojáun" vasco y otros muchos: así, aunque algunos puristas, como Aurelio del Llano, han interpretado que se trata de un personaje adscrito más o menos recientemente a nuestro panteón mitológico y, por tanto, rechazan su carácter autóctono o su antigüedad, nos parece, manteniendo invariable nuestra línea de trabajo, que el mito tiene una vigencia y una extensión geográfica que casa mal con esa hipótesis, por la que creemos que tiene derecho a figurar por derecho propio en el mismo. Y en nuestra ayuda vienen las decenas de leyendas que, con grandes y Pequeñas variantes, se han ido recogiendo en el paciente trabajo de campo de tantos estudiosos, tales como Jove y Bravo; C. Cabal; R. Baragaño; A. Alvarez Peña; etc.
Por otro lado, sí que hemos de reconocer que el personaje es conocido con nombres muy diversos en nuestra geografla: así, en el noroccidente, es el bulligoso, "burgoso"; "musgoso", etc.; en Tineo y Cangas' el "peloso"; en el oriente, le conocen como "mofosu"; etc. En todo el occidente se cree que su beso causa la tisis, demacrando a sus víctimas y llevándoles a una cruel y lenta muerte.
Físicamente, lo podríamos describir como un ser mitad humano, mitad caprino (en algunas zonas, incluso se le ve con apariencia de batracio, de ahí el expresivo nombre de "mofosu", como en Piloña); tiene enormes cuernos de cabra y ojos muy ardientes; vive en la espesura de los bosques y, ataca a los cazadores y leñadores, a las mozas, etc. Aún así, sería injusto considerarle un personaje dañino en exclusiva, ya que tiene mucho en común con el pacífico Fauno de la mitología grecorromana.
En base a todo ello, José M. Gómez-Tabanera vinculó este mito al del "señor de los bosques", estableciendo paralelismos con el antiguo mito del oso humano, como se ve en viejas leyendas, tales como la de la osa de Andara (mujer-osa de los bosques cántabros, que cuida rebaños de cabras en los riscos y come miel y bayas) o la poética leyenda del ábside del monasterio de Comellana, donde se representa una niña en brazos de una osa, simbolizando una vieja leyenda medieval según la cual la hija del rey o bien la del señor de Dóriga -ambas versiones son conocidas- se perdió en el bosque y fue amamantada por una osa y su padre, agradecido tras el hallazgo de la hija sana y salva donó este monasterio.
Incluso se podría establecer una cierta pervivencia actual en algunas manifestaciones populares, como algunos centenarios personajes carnavalescos, tales como el "mazcarito" de Beleño, etc., que unen a su simbolismo ritual un marcado carácter profiláctico (golpean a las mozas con vexigas y las manchan con harina o con hollín, sin duda pervivencia de un milenario ceremonial regenerador).

EN ASTURIANO:
EL MOFOSU O BUSGOSU
Figura: Semihumanu. Ye mui peludu o va cubiertu de mofu, según delles figuraciones. N´otres ye pequeñín, besucón y bulligador, que s´apaez ente lo cerrao del monte nes nueches escures como boca llobu.

Allugamientu: Bosques y cueves.

Acciones: Rapta o ataca a les muyeres, fundamentalmente. Relaciones colos humanos: Diches ya n'acciones.

Recursos psicolóxicos que'l mitu cinca: La llercia pánica a les fuerces de la naturaleza y la soledá. La muyer como oxetu de deséu; l´amenaza de violencia sesual sobre la muyer.
Sinónimos: Peludu, Bulligosu.

LAS CHALGAS O LAS AYALGAS

La referencia a las "Chalgas" o tesoros escondidos es algo consustancial con nuestra tierra asturiana, ya que no hay pueblo o aldea, por remotos que sean, donde no se hallen leyendas de tesoros escondidos, casi siempre atribuidos a los moros.
Aunque en las descripciones. de los primeros estudiosos se utiliza el nombre para los tesoros, los estudios posteriores asimilaron el término a ambos y las hacen prácticamente semejantes a las xanas, por su singular belleza y juventud, aunque parece que se diferencian de éstas en que las jóvenes doncellas son seres humanos encantados, mientras que las xanas no están siempre encantadas. Debido a su penosa situación, presentan habitualmente una expresión de gran tristeza, cantando bellas, pero melancólicas canciones, mientras el cuélebre permanece atento a sus movimientos, excepto el día de San Juan, en que entra en un sopor irresistible, momento en que se les puede desencantar.

Alvarez Peña, considera que se está llegando a una confusión entre la denominación del tesoro y de la doncella, matizando que el término "Chalga" se refiere solo al tesoro custodiado por ellas, que serían, por deducción de noticias recogidas en Piloña, etc., princesitas encantadas o moras castigadas por su infedilidad. o apostasía, de acuerdo a múltiples noticias. El mito suele estar relacionado con un contexto "pre" o "protohistórico" (presencia de cuevas, dólmenes, túmulos, etc.), como hemos podido constatar en la llamada Cova dos Mouros (Boal) o en el castro del Monte das Coroas, en La Roda (Tapia).Para algunos de los modernos estudiosos del folklore tradicional asturiano, como Xuan X. Sánchez Vicente y Luciano Castañón, el mito no es más que una mixtificación, un invento erudito, acusación muy habitual en estos temas donde los testimonios se van haciendo tan vaporosos como las mismas doncellas.

En cambio, Ramón Baragaño, aún dudando de su pertenencia real al patrimonio astur, considerando que es posible que los pioneros hallan engrosado el mismo con mitos de regiones fronterizas a la nuestra, considera discutible la tesis reduccionista de nuestros mitos, abanderada por el anterior, muy en la línea de los "puristas", que inició el inolvidable Aurelio del Llano, y define las "chalgas" como jóvenes hermosas que viven en palacios encantados, guardando enormes tesoros, pudiendo desencantarse en la mañana mágica de San Juan, ya que el cuélebre se duerme profundamente. Siguiendo el hilo argumental de los primeros estudiosos, como Tomás Cipriano Agüero, describe la escena considerando que las jóvenes doncellas se aparecen rodeadas de una tenue llama, que se puede apagar con una ramita de sauce -el valor profiláctico del sauce era conocido desde la más remota antigüedad; su concreción clínica actual se da a través del ácido acetilsalicílico, popularmente la aspirina-; cuando la llamita se apaga, el camino se abre para el intrépido joven, que penetra en la cueva siguiendo a la bella doncella, a la que ase por el ceñidor de su talle, hasta que llega al tesoro. Gumersindo Laverde, coetáneo del anterior, había añadido a la anterior descripción algunos detalles nuevos, tales como que las jóvenes, que considera son algo menos bellas que las xanas, están custodiadas por cuélebres y la causa de su encantamiento y consiguiente desgracia han sido algunas faltas.

martes, noviembre 07, 2006

EL NUBERU O REÑUBIERU O XUAN CABRITU

  • También conocido como Reñubeiru o Xuan Cabritu.
  • Es la divinidad de las nubes y las tormentas, se le representa como un hombre con espesa barba , viste pieles de cabra y un sombrero de ala ancha, puede ser terriblemente dañino con las personas dañando pastos y sembrados, si bien puede ser muy beneficioso con aquellos que le ayuden.
El mito nos cuenta que vive en Egipto en la ciudad del grito, en una ocasión vino a Asturias montados en las nubes, teniendo la mala suerte de caerse a la tierra, pidió cobijo y nadie se lo dio hasta bien entrada la noche en el que un pobre campesino se apiadó de él. En gratificación todos los años le riega bien sus sembrados aumentando estos. Años después este campesino tiene que efectuar un viaje al lejano Egipto , enterándose el campesino de que su amada después de tantos años de ausencia decide casarse con otro, va a pedir ayuda al Nuberu , este le monta en una nubes llegando a tiempo para impedir la boda. En los pueblos para evitar la llegada del Nuberu se hacía tocar las campanas de la iglesia.
Se dice que lleva el agua para los campos de los amigos y la piedra ( el granizo ) para los de los enemigos, y es capaz de arrasar cualquier cosa, incluso un bosque de carbayos centenarios, en una sola descarga. A pesar de su enorme poder destructor, se le puede exconxurar para impedir que descargue en las casas y los sembrados y enviarlo " a sierras peladas ", allá " donde ni el gallo canta ni la gallina cacarea, donde ni el arador ni el sembrador obtuvieron semilla ni nada es de nombrar ", según reza el viejísimo conjuro de la pizarra gótico-latina de Carrio ( Villayón ), datada en el siglo VII.

El Nuberu asturiano tiene nobles antecedentes en la mitología greco-latina. Así, en la Grecia clásica, adoraban a Zeus, el soberano de los hombres y de los dioses, que además de presidir el olimpo, provocaba la lluvia, lanzaba el rayo y el relámpago y dirigía las tormentas. Los romanos lo identificaron con Júpiter, señor del cielo, de la luz diurna, del tiempo atmosférico, del rayo y del trueno. Por su parte, los celtas adoraban a Taranis, dios del rayo y del trueno y protector de los guerreros, y los germanos a Wotan, dios del trueno que cabalga sobre las nubes. no pocos topónimos asturianos están relacionados con estas divinidades del rayo y el trueno cuyas denominaciones penetraron en distintas oleadas. Así, el pico Sueve ( Colunga ), la pena Sobia ( Teberga ) y piedra Xueves ( Somiedo ), derivados de Jovis ( Júpiter ); Tarañes ( Ponga ), Táranu ( Salas ) y Tarañosdiós ( Cangas de Onís ), derivados de Taranis; incluso, Godán ( Salas ), posible derivado de Wotan.

Al Nuberu asturiano se le describe de diversas, pero predomina la apariencia física de hombre barbudo ( de muy elevada o muy corta estatura, según los casos ), con la ropa chamuscada y cubierto con un sombrero negro de ala ancha, que a veces desciende a tierra etre la niebla y solicita algún tipo de alimento o ayuda a los pastores de los puertos. Es un ser agradecido y suele corresponder a la hospitalidad de los campesinos, bien auxiliándoles cuando por causa del servicio militar o por algún golpe de fortuna tienen que aventurarse por tierras de África - que es donde vive el nuberu asturiano - o bien librando sus sembrados de la tormenta o avisándoles para que recojan la cosecha antes de que descargue la nube.

Al Nuberu se le puede esconxurar volviendo un carro de avieso, es decir, del revés, o tocando las campanas de determinadas iglesias o capillas que tienen poder de ahuyentarle. También algunos curas tienen el poder de esconxurar al nuberu leyendo libros sagrados o arrojando un zapato contra la nube. en este último caso, el nuberu suele descargar la piedra de granizo allí donde cae el zapato. Además de estos esconxuros, específicamente ditigidos al nubero, existen otros procedimientos para desviar la tormenta y proteger las casas y haciendas de los campesinos, como quemar laurel bendito, sacar la pala del horno y el rodabiellu y ponerlos en cruz fuera de la casa, quemar velas teneblinas bendecidas el día de jueves santo, colocar instrumentos cortantes, hachas y cuchillos, con el filo puesto hacia la nube, e invocar a determinados santos como Santa Bárbara o San Bartolomé con plegarias y conjuros. En algunas leyendas, sobre todo del occidente de Asturias, se dice que los nubleiros bajan a tosquilar las cabras antes de fraguar las tormentas, y que por eso cada piedra de granizo que cae al suelo tiene dentro un pelo de cabra.

lunes, noviembre 06, 2006

LA GUAXA

Según la leyenda, es una vieja seca, arrugada, con unos ojos en cuyo fondo parecen brillar chispas.

Donde hay un niño rollizo, un mozo robusto o una muchacha hacendosa y fuerte, penetra la guaxa por la noche, durante el sueño, y con el único diente que tiene, les abre una arteria y chupa su sangre con delicia.

No hay obstáculo para ella; allí por donde pase un soplo de aire, pasará ella también. Parece ser que la Guaxa es un mito falso que han querido identificar con la figura de Lámia griega y el vampiro de las leyendas germánicas.

Algunos relacionan también a la Guaxa con la coruxa (lechuza), estrechamente relacionada con las brujas, por lo que se considera a la Guaxa como una bruja. Se la puede ahuyentar con un amuleto, un exhorcismo o un milagro.
EN ASTURIANO:
LA GUAXA
Figura: Indeterminada. Nun hai dala indicación d'ella.

Acciones: Fai que la xente amalique y enruince, hasta llegar a morrer en munchos casos. El dir a menos un ñeñu o persona enantes robustu, sobre tou ensin causa aparente; l'empalídecer progresivamente; el perder la salú y pasar la vida con matuxes, son muestres de que ta a un comiéndolu La Guaxa. Failos esapaecer comiéndolos.

Apaiciones: La Guaxa nun se ve.

Relaciones colos humanos: La Guaxa sólo se manifiesta al través de les enfermedaes, la muerte y la espaición de les persones. Fuera d'ello nun tien esistencia.

Recursos psicolóxicos que'l mitu cinca: El mieu a la muerte y a la enfermedá. El mieu a les amenaces incontrolatibles.

EL DIAÑU BURLÓN

Es un mito de procedencia indoeuropea, que guarda ciertas similitudes con el mito del Trasgu, aunque con ciertos matices que le diferencian, ya que el Diaño actúa más fuera de casa y, además, es un diablo, que puede adaptar múltiples formas, tanto animales como humanas.
En algunas ocasiones se presenta en forma humana, generalmente de niño indefenso, (como la historia común de la aldeana que lo encuentra llorando en la caleya y lo lleva a casa, calentándolo en el llar y dándole de mamar, a lo que el ingrato responde, escapando por la "garmayeira" y gritando con risa burlona: "Ajajá, que comí sopes; ajajá, que les comí; ajajá, que te ví el cú; ajajá, que te lu ví").
Aún así, es más común que adopte formas animales, siendo habitual las de cabrito (así nos lo contó una vieja abuela ya fallecida en Puerto de Vega, pues en un concurrido baile que se hacía en una casa del pueblo se presentó un alto y guapo mozo y todas querían bailar con él, hasta que una de las mozas le vio la pata de cabrito y todas echaron a correr y él se desvaneció en el aire, como si hubiese sido un mal sueño); cerdo (hemos recogido en el mismo lugar la leyenda de que una mujer pobre y con muchos hijos encontró un "gochín" sin dueño y lo llevó a casa y lo metió en el cubil y, al día siguiente, cuando le quiso "echar la caldada"; es decir, las sobras de comida, el "gochín" se había esfumado; y de burro (el cuento más conocido y más difundido por toda Asturias es el del aldeano que va a montar en su burro, que se niega a andar y ya cuando logra que camine, éste lo derriba en un lodazal, mientras se levanta de patas y ríe, diciendo: "Tiruli, tirulo, ¿cómo ténes el culo? El paisano, airado, lo llena de palos, mientras le responde "Tirulí, tiruleyas, ¿cómo tán las tus orellas?".
En Ponticiella, según Alfredo Álvarez, se le apareció uno al cura cuando iba para Trabada, pero, sabedor que era un diablo, se deshizo de él diciéndole "Jesús, María y José".
En la íntima creencia popular, aún quedan los temores a la acción malévola del Diaño u Diantre; de ahí, las formulillas que aún utilizan nuestros mayores: "Arreniego del demonio"; "Arreniego del pecáu" o "Arreniego de los cotrosos del infierno"; o la más compleja, que transcribe Aurelio del Llano y otros, como esta versión de Allande: Jesús, María y José: Si sos el diaño de ti arreniego; mal año pa ti; doite mierda de gato negro; la Cruz te fago; veite pá las penas de Fontoria".Pero no se asustan demasiado con todo eso: en Figueras les tiran la pila de ocle a los pescadores y en Luarca, hacen ruido en el cantil para asustar a los que están pescando. 0, como hemos recogido en Llendequintana, a los que recogían castañas y las guardaban en la corripia, les hacía burla, diciendo: "Sacude, sacude, que mañá has ter ben d'ellas"; y, efectivamente, al día siguiente, la corripia estaba vacía. Los del occidente tienen justa fama de constructores, y de hecho reciben el nombre de "ARQUITECTOS", ya que un "demo" fue el constructor del puente de Ourubio en Boal (según Bernardo Acevedo) y otro construyó el puente de Salime; por cierto, que al concluirlo, los lugareños, lo tiraron desde él al río para que se ahogase, pero consiguió salir nadando y les gritó desde una roca: "Eh, salime, salime ', dando nombre al pueblo. En Boal también se habla de unos diablillos llamados "DIABRECOS", que tienen apariencia de llimacos y hacen travesuras, descubren conversaciones íntimas, etc.
Se dice también que el "Demo" o "Diaño" fue el que escondió los tesoros de los moros que se citan en las "Gacetas" y en el famoso "Ciprianillo" (así nos lo refirió un viejo buscador de oro en las minas romanas de La Andina, que nos decía que nunca fueron quién a atopar donde lo tenía escondido). A veces, se presenta como una especie de mano peluda gigante que te empuja y te oprime impidiéndote moverte o dormir y hasta respirar, lo que demuestra la dualidad del personaje, aunque se le da el nombre de 'PESADIELLU", como el de la historia que sigue: un aldeano portaba un cabrito que cada vez pesaba más y de pronto salta de los brazos y se mofa, diciendo: "Ji, ji, jí, mexéi por ti".

viernes, noviembre 03, 2006

LA GÜESTIA O SANTA COMPAÑÍA

En castellán La Hueste. Ye un desfile de fantasmes , un grupu mitolóxicu compuestu por una procesión de muertos que vaguen na nueche. Equival a la Santa Compaña gallega y tamién col nome de la Bona Xente. Son unos ánxeles sin cielu que recuerden a los vivos les consecuencies del pecáu.

Cuando na aldea hai un moribundu van a la caída de la nueche llevando un ataúd. Al llegar a la casa del malu dan tres vueltes al so alreedor y l’home muerre y una replica del so cuerpu ocupa’l féretru que se lleven entre cancios fúnebres. Cuando marchen apaguen les antorches y piérdense na oscuridá

El fin de La Güestia yera más servir de consuelu a los difuntos nel so fin, que meter mieu a los vivos.

Paez ser que los miembros del cortexu son los espíritus d’aquesllos que’l muertu conoció en vida y que morrieron anantes qu’él
Hai otra versión qu’equipara esti grupu con un exércitu desconocíu que vaga perdíu na nueche y que trai la muerte y la destrucción. N’esi casu, comparando esta cola primera versión, sustitúyese l’efeutu pola causa, relacionando lo fúnebre con aquello que lo provoca.

En munchos sitios d’Asturies identifícase La Güestia con grupos de monxos que camudábanse peles nueches pa aliviar el rigor de los sos votos o col pequeño cortexu de cura y acólitos que van a administrar el viáticu al moribundu.

Entre los mitos homólogos d’otres cultures hai que considerar less Walkyries nórdiquess, que forman el cortexo que traslada a los héroes al Walhalla o paraísu de les almes pures.
Pa defenderse d’ella hai que dibuxar un circulu nel suelu y metese dentro d’él. En San Xuan de Beleñu, defiéndense de la Güestia suxetándose a un xatu.

La Güestia: Ye un cortexu d’almes que purguen los sos pecados y salen pela nueche de los cementerios, paseanse pelos caminos con cirios y los güesos y ye premonición de muerte para quien lo ve. Los sos componentes van vestidos con llargues túniques blanques y cada un d’ellos lleva una vela o un güesu humanu prendíu, mientres caminen van tocando una campanina. Y canturreando una salmodia.